Todo intento es en vano
andan libres como el ave
no hay lazo ni cobre que las amarre.
Clavo y Canela no hacen caso,
disparan en las tardes nubladas
por decir, cuando se les da la gana.
Escapan de todos pienso
cuando sólo escapan de mí, quiero.
Por ahí se rascan las costillas
con la corteza de un árbol, se aplastan;
chupan de baldes y botellas
hacen amigos para siempre.
Clavo y Canela son de esas
a las que nada le alcanza.
Yo siempre espero que regresen
para acariciarlas, soplarlas y besarlas.
muy lindo che!
ResponderEliminary no conocía a guitarras nocturnas
increíbles!!